Saliendo de Grado deberás subir hasta San Juan de Villapañada, aldea a la que no es necesario entrar, y continuar por un fuerte repecho de asfalto hasta el alto del Fresno. Aquí se encuentra el Santuario de la Virgen del Fresno, al que se acude en romería cada 28 de septiembre…. Una parada para recuperar el aliento está más que justificada.
El trayecto desciende por un camino, que abarca una impecable panorámica del valle y donde destaca en primer plano San Marcelo, localidad de unos 30 habitantes que pertenece al concejo de Salas. Los hórreos y paneras abundan, aunque muchos de ellos ya no se utilizan como almacén de maíz. Son los efectos del despoblamiento rural. Se deja San Marcelo por carretera y pronto se toma un camino a la izquierda que, paralelo a un riachuelo, nos introduce en La Reaz y sigue hasta La Doriga. En este pueblo se puede admirar la iglesia románica de Santa Eulalia y un palacio del siglo XIV. Una senda de tierra y piedras entre musgos y enredaderas sale a la carretera en La Ponte, antesala de Cornellana, población a la que se accede un kilómetro más adelante tras cruzar el puente sobre el salmonero río Narcea.
El camino asciende y bordea el alto de Santa Eufemia, donde se obtiene una magnífica vista de Cornellana. Un sendero por bosque, donde no es extraño el encuentro fugaz con algún corzo, conduce a Llamas. Desde esta aldea se avanza por terreno llano y recto dejando a la derechaQuintana. Más adelante, la Asociación Salas en el Camino ha construido un cobijo con un par de bancos en el paraje de Fuente Caliente. Aquí termina la monotonía porque a mano izquierda surge una senda que asciende y desciende para buscar el cauce del río Nonaya, que se salva por un puente para entrar en Casazorrina. El siguiente hito es Mallecín y tras cruzar la carretera un camino nos lleva hasta Salas, fin de la segunda etapa.